Con la llegada del COVID-19 y la nueva normalidad, las oficinas también atravesaron una serie de cambios y modificaciones para evitar los contagios entre compañeros de trabajo. Estas son cinco medidas fundamentales para el trabajo en oficinas concurridas.
- Cambio en la mentalidad y cultura empresarial
Estas nuevas normas podrían parecer una pérdida de la libertad para algunos colaboradores, pero a mediano, largo plazo, pueden significar la mejora en los planes de comunicación, tanto internos como externos, con el fin de proteger y prevenir, no solo a los trabajadores, sino también a sus seres queridos.
- Reducción de personal presente en oficinas
Para evitar contagios, en algunas empresas fue necesario reducir la cantidad de trabajadores presenciales, o en otros casos, la modalidad Home Office se aplicó en la totalidad de la nómina, haciendo de esta modalidad de trabajo una constante.
- Redistribución de mobiliario
Asimismo, en ocasiones no era posible enviar a los trabajadores a sus casas, por lo que se dio una tendencia a reacomodar el mobiliario para reducir al máximo los posibles contagios por contacto indirecto con algún contagiado.
- Ajustes a las normas de presencialidad
De la mano de los dos puntos anteriores, también fue necesario modificar e implementar nuevas normas empresariales, como lo fue el uso de cubrebocas en todo momento y el lavado frecuente de mano.
- Sanitización constante
Finalmente, el sanitizado constante de áreas y superficies también se volvió una constante en la rutina diaria y laboral, lo que ayudó a brindar tranquilidad a los trabajadores cuando regresaron a las oficinas de forma presencial y, a su vez, reducir los contagios.
Estas son solo algunas de las modificaciones necesarias para evitar contagios y en Joy W Offices lo sabemos, por lo que contamos con protocolos de sanitización certificados, que se aplican de forma periódica para evitar contagios y puedas trabajar con toda tranquilidad.